Sábado 14 de julio de 2,012 tras un viernes 13 (¡no me digas!) lleno de suerte:
— 12:45 AM —
Luego de regresar de una presentación para Teletón con un grupo que no me gusta por su estilo musical tan POP FRESA (pero necesitaban un guitarrista, y no habría sido culero de negarme), y de un golpe de suerte tremendo en viernes 13 que hizo que cortaran la transmisión de la TV antes de la presentación, decidí levantarme a las 9:00.
— 10:45 AM —
Me levanté. No escuché mi alarma.
— 12:05 PM —
Luego de ayudar en mi casa, atarantar el arreglado de mi cuarto y desayunar, empecé con una tarea que dejé a última hora.
— 1:30 PM —
Terminé la tarea. No la imprimí, no me daba tiempo. Además, mi USB no funcionó, por algún motivo que hasta ahorita desconozco.
— 1:38 PM —
Terminé de atragantarme el almuerzo, y salí corriendo de mi casa porque el
...
— 1:57 PM —
En el camino descubrí que no llevaba dinero, y estuve tomando valor para decirle al chofer que no tenía y esperar su cara de “ah, hijo de la gran puta” o algo así. Le quedé debiendo. Bajé del bus, y corrí hasta llegar apenas a tiempo a mi clase.
— 2:55 PM —
Salí de la clase para imprimir mi trabajo. Al único que conozco de esa clase (soy nuevo ahí), le pedí prestados Q.10.00, pero solo llevaba UNO. En fin. Le quedé debiendo al del internet, porque no quiso que le pagara con una galleta Can-Can.
— 3:20 PM —
El #%@! catedrático, dijo que recibiría el trabajo dentro de DOS SEMANAS, porque “muchos compañeros aun necesitan un repaso de algunos contenidos”. Cerote. Cerotes. Cerotes todos.
— 3:35 PM —
A esa hora salí, y pese a que todo el tiempo en la clase observé un cielo despejado, en ese momento (sin pajas, usté) se nubló y empezaron a caer gotas como del tamaño de las lágrimas de Özil. Mi pobre paraguas (que ese día estrené), apenas pudo mantener seco mi pecho. Hasta dudé del amor de mi mamá por darme un paraguas en vez de un arca.
— 3:50 PM —
Mojado, sin pisto y endeudado por culpa de un trabajo que ni entregué, me fui a la casa de mis abuelos a prestar dinero… y ropa. No soy tan chillón, pero no estaba tan mojado desde la primera vez que vi el vídeo en que Katy Perry sale desnuda sobre algodón de azúcar.
— 4:15 PM —
Salí de la casa de mis abuelos con Q.5.00 que le presté a mi tío, y luciendo un look S O A W E S O M E , B I T C H . Un pants color ROJO de lo más llamativo, un suéter negro y mis calcetines blancos que se veían bajo el ruedo.
— 4:45 PM —
Vine a mi casa a bañarme y alistarme para salir de nuevo, pues a las 5:30 salía el bus para San Cristobal, Totonicapán, en donde tenía otra presentación con el grupo popero en que me comprometí a tocar.
— 5:50 PM —
Llegué y todos estaban como la gran puta por mi impuntualidad. Fuimos a Sancris, y al llegar no pudimos armar el sonido porque había otro grupo que también tocaría.
— De 6:45 PM a 12:30 AM —
Resumiendo la actividad: Organización pésima, sonido terrible, armamos todo una vez y nos hicieron quitarlo de nuevo, la señora de la comida se fue temprano antes de que cenáramos, y por ello nos llevaron la cena hasta las 11:30, el transformador del piano no sirvió (así que me llevó "la Maricruz" solo a mí con la armonía), tocamos un solo set de los dos preparados, y lo imperdonable: ¡¡LAS CUATRO CANDIDATAS ESTABAN FEAS!!
Antes de llegar a la moraleja de la historia, es tristísimo para mí colocar aquí un link a la PARTE DOS, pero pues, así de deprimente es mi vida. Gracias por su atención
Moraleja: Ninguna, saber qué putas, ha sido lo más hipster al "Bad Luck Brian style" que me ha pasado. Pero me estuve cagando de la risa de mí desde que el Lic. dijo que no recibiría el trabajo. Talvez sí haya moraleja: cáguense de la risa de ustedes mismos, y por cagado que esté lo que están viviendo, no dejarán de sonreír puros imbéciles, pero imbéciles felices.
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